1. Desecha todos los prejuicios
No es verdad que invertir esté reducido a personas con mucho dinero o a inversionistas profesionales. Una persona común y sin experiencia puede hacer crecer su patrimonio invirtiendo en propiedad raíz. La clave está en desechar todos los mitos y prejuicios que tengamos.
2. Empieza de a poco, pero con paso firme
Toda persona que se inicia en las inversiones debe saber que no existen fórmulas mágicas, sino que se requiere de paciencia. Así que lo ideal es comenzar de a poco, pero haciéndolo con firmeza. Recuerda que al fin y al cabo se trata de una inversión que debe ser trabajada para obtener liquidez y solvencia.
3. Busca una persona o sitio especializado
La asesoría de un experto en propiedad raíz. Una empresa especializada en el sector inmobiliario, como Orientamos Propiedad Raíz, que cuenta con una trayectoria en el mercado que te ayudará a no cometer errores y a hacer los movimientos correctos para garantizar el éxito de tu inversión.
4. Confía en tu intuición
Recuerda que tu intuición la mayoría de las veces acierta. Si algo es demasiado bueno para ser verdad, tal vez lo sea. Confía solo en profesionales serios y reconocidos del sector.
5. ¿Tienes conocimiento suficiente para invertir en propiedades o necesitas apalancarte?
Apalancarte es la mejor opción cuando empiezas, porque es una forma de evadir la inflación. Esto es lo que debes saber para hacerlo:
Digamos que compras una propiedad raíz en COP 500.000.000 y que la inflación el año en que la compraste es de 5%; eso significa que a finales de año la propiedad valdrá unos COP 525.000.000.
En cambio, si compras esa misma propiedad usando un apalancamiento y pagas solo COP 100.000.000 al inicio, y amortizas paulatinamente el resto del precio, a final de año tendrás una propiedad con un valor de COP 525.000.000.
Esto representa una «ganancia» de 25.000.000 de peso sobre 100.000.000, es decir, el 25%. Algo muy superior al índice de inflación, lo que sumado a las rentas que vas a percibir por la operación de tu propiedad, aumentará tus ingresos y protegerá tus finanzas de la inflación.
Otra ventaja de este procedimiento es que la misma renta de tu propiedad te puede servir para abonar las cuotas del apalancamiento inicial.
6. Recurre al dinero o al tiempo de otros
Contratar un administrador inmobiliario es lo mejor cuando no dispones de mucho tiempo para poner a trabajar tu dinero, sobre todo si no quieres dedicarte de lleno al mantenimiento de tu propiedad raíz y de las responsabilidades que adquieres como arrendador.
7. El beneficio es la compra de la propiedad raíz
El beneficio, es la compra de un inmueble que se revaloriza con el tiempo y que no degrada su valor físico, aunque haya caídas en los precios del mercado; algo que no puedes hacer con otros
8. Analiza qué es mejor para invertir en propiedad raíz
Si el mercado está en descenso es ideal para especular y adquirir una propiedad raíz; pero si deseas vender, este sería un escenario adverso. En este caso, lo recomendable sería arrendar, mientras esperas a que los números comiencen a subir.
El arriendo es muy positivo en los tiempos «malos», a pesar de la fluctuación del mercado, estás generando ingresos. La mejor parte es que cuando la propiedad se revalorice podrás proceder a venderla.
9. Diversifica
No apuestes todo a una sola inversión. Todo buen inversionista sabe que debe diversificar sus ingresos. Una buena forma de hacerlo en propiedad raíz, consiste en adquirir inmuebles distintos y de diferentes tipos.
Por ejemplo, puedes invertir en un apartamento tipo familiar en el centro de la ciudad y en una oficina en una zona comercial. Así estarás combinando dos modelos de posible rentabilidad; si uno falla, el otro probablemente no lo hará. Mientras más diversifiques, más protegido estarás.